Chiapa de Corzo según Benkidu

Un lugar muy cercano a Tuxtla, de los primeros que visitamos, fue Chiapa de Corzo. Hay muchos colectivos en toda la ciudad, y por suerte, cerca de donde estábamos rentando salían gran parte de ellos. 

Chiapa de Corzo es un lugar interesante. Históricamente, es uno de los pueblos que más lucharon contra la ocupación de los españoles, y tras su caída se convirtió en Chiapa de los Indios, la capital indígena de la región, contrastando (en muchos sentidos que son bastante evidentes) con Chiapa de los Españoles, ahora San Cristóbal de las Casas.

Lo primero que sentí al llegar fue el calor. No soy muy feliz en temperaturas altas, y precisamente ese día se me ocurrió irme sin gorra. Los paliacates que compramos explican mi desesperación ante la inminente insolación xD.

Santo Domingo, vista lateral.

Santo Domingo, visto desde abajo de la Ceiba

Una de las cosas que más me gustó, y que fue una recomendación de una compañera del zoológico, fueron unos dulces típicos llamados suspiros, hechos a base de yuca, huevo y piloncillo. Son unas bolitas color café obscuro, firmes, de sabor curioso, como a pan, a canela, me recordaba un poco a la textura del camote, pero totalmente diferente. 

Fui fiel cliente de los Suspiros de este puesto!

Arcos que rodean la plaza central.

Guigo acalorado, cuando por fin decidimos comer algo junto a los embarcaderos.

Nótese mi cara de agobio por el calor.

Gran parte de las personas que vienen a Chiapa de Corzo es porque de aquí salen las embarcaciones que dan el tour en el Cañón del Sumidero, por lo que todo el tiempo está lleno de turistas, y de personas que ofrecen los mejores precios para el tour, lo cual es un poco agobiante.

En la plaza central se encuentra La Pila, edificada en honor a Santo Domingo de Guzmán, entre 1554 y 1572. Hecha totalmente de ladrillos y estilo mudéjar, es uno de los principales atractivos de lugar, y en lo particular me agradó bastante.

La Pila.

Vista de cerca, es más grande de lo que parece.

Mucha gente se reúne a sus alrededores o bajo su sombra, y la verdad es que en un lugar tan caluroso (en diciembre!!!) un poco de sombra se agradece bastante!

Guigo y La Pila :D

Selfpic en La Pila con mi nieve oaxaqueña.

Una de las cosas que me parecieron particularmente atractivas de Chiapa de Corzo fueron las artesanías decoradas con laca. Han de saber que me gustan bastante las artesanías, y estas en particular me agradan por el contraste de colores y por el trabajo que implica. Es tan importante para este lugar que hasta existe el museo de la laca, el cual no pudimos visitar, pero vimos muchos ejemplos caminando por las calles.

Cruces decoradas con laca en un taller artesanal.

Después de caminar por las calles de Chiapa, terminamos bastante cansados y acalorados, por lo que antes de regresar a Tuxtla compramos un helado (abundan las nieves oaxaqueñas en todo Chiapas, al igual que las muy comerciales heladerías La Michoacana) y pasar un rato por la plaza central, sentados a la sombra de algún árbol o simplemente en el suelo para tomar fotos.

Yo sintiéndome artsy tomando fotos en blanco y negro de Guigo.

Colección de pulseras de Guigo. 

CALOR DIJE!!!

Después de la primera visita, quedamos con ganas de volver, ya que hubieron más cosas que ver y que comprar, además de que, a pesar del calor, nos gustó el lugar. Y, debo ser sincero, por los Suspiros!

Mejores que los Suspiros de yuca, son estos a tu lado :D